Haciendo tiempo en los aeropuertos de vuelta aprovechó para escribiros este post de mis primeras experiencias astronómicas en Australia.
Ha resultado apasionante el contemplar el cielo austral desde el hemisferio sur, del viaje a Australia me quedo con la experiencia de Alice Springs, despejada, la luna en cuarto creciente sentado en una silla en el jardín de la casa de Kathy donde estuve hospedado observando bajo una contaminación lumínica mínima el cielo austral.
Alice Springs de halla situada en el centro de Australia, en el estado del territorio del norte y tiene una población de solo 25.000 habitantes. Es decir, está en medio de la nada.
Fue el segundo día, cuando el cielo estaba completamente despejado, cuando pude observar con todo, detenimiento el cielo austral; la emoción máxima.
Saqué mi linterna, mi láser, un libro antiguo de astronomía que tengo donde aparecen las constelaciones boreales y australes según por meses de visibilidad y empecé a soñar localizando las constelaciones.
Era una noche cálida del verano austral, del desierto australiano y me puse a distinguir primero las constelaciones que ya tengo localizadas.
Estaba sentado frente al polo sur situado desde Alice a solo 23° sobre el horizonte ya que la latitud de Alice Springs es de -23°. A mi derecha estaba observando la constelación de Orion al revés que ya por si impresiona, la Luna en cuarto creciente en forma de C y no D como lo vemos en el hemisferio norte y Sirius casi en el cenit.
Para mí, ver Sirio en el cenit impresiona, ya me pasó cuando la observé desde Melbourne, Ausrtralia en diciembre de 2014. No os podéis imaginar cómo sorprende verlo en el cenit cuando desde el hemisferio norte y más concretamente desde Malorca con una latitud de +40° culmina a solo 35º sobre el horizonte de invierno.
Estaba sentado frente al polo sur, a mi derecha tenía la constelación de Orion al revés tal como se observa desde el hemisferio sur y muy cerca de Orion la luna en cuarto creciente con la particularidad de observarla al revés en el hemisferio sur; es decir, la Luna en el hemisferio norte la fase creciente la observamos en forma de D; en cambio, en el hemisferio sur la observamos en forma de C. En este caso, la Luna no nos miente cuando la observamos en latitudes australes.
Lo curioso del fenómeno fue al observar la Luna desde la isla Canguro en el estado de Australia meridional, en la excursión que realicé ese día. Me sorprendió verla al revés y con la particularidad de ver la Luna a la derecha del Sol y no a la izquierda como la observamos en el hemisferio norte; de ahí que me resultará raro el observar el fenómeno.
Bandera de Territorio del Norte (Australia) y la Luna en cuarto creciente
También me llamó la atención el que el meridiano en el hemisferio sur apunta hacia el norte y no hacia el sur tal cómo es en el hemisferio norte. Está claro que todos los objetos celestes se ponen en el oeste y salen desde el este; pero el movimiento que resulta es la revés y te parece extraño observarlo desde el hemisferio sur. En definitiva, el mundo al revés.
Sirio en el cenit me impresionó bastante pero lo que había leído hace muchos años se hizo realidad el que en el algunos libros comentaba que desde el hemisferio sur Sirius está revalidando por otra estrella casi tan brillante como ella y más o menos cerca. Se trata de Canopus, de magnitud -0,90 que desde el hemisferio norte y con una latitud de +40º es inobservable; pero que desde donde os escribo rivaliza y se localiza muy fácilmente en el hemisferio sur; se halla en la constelación de Carina y próximo a Sirius.
Posteriormente puse mis ojos y prismáticos hacia la cruz del sur y centauro; ambas contestaciones localizadas en diciembre de 2014 desde Melbourne (Australia).
Centrado en la cruz del sur, al observar la vía láctea podemos observar la falsa cruz del sur que se trata de una combinación de estrellas de Carina y Vela; es real curioso.
Falsa cruz
Pegado a la cruz del sur y en dirección al polo sur se observa la débil constelación de la mosca (Musca, Mus) en forma de triángulo y muy próxima a la cruz del sur; Musca la localicé a las 21:08 hora del 17 de marzo desde Alice Springs en el Territorio del Norte (Australia) GMT+9:30.
Constelación de la mosca. Musca (Mus)
Luego me dirigí hacia Canopus y observándo el sur de la constelación de Carina con Puppis podemos observar la pequeña constelación de Volans (Vol) localizada a las 21:14 del 17 de marzo. Se trata de una constelación débil en estrellas que requiere unos prismáticos para observar toda forma.
Constelación de Volans (Vol)
Centauro es una curiosa constelación donde se da la particularidad que rodea a la constelación de La cruz. Si sigues con unos prismáticos te llevas varias sorpresas y una de ella es ver la alineación de estrellas de centauro y como le rodea a la cruz del sur.
Si nos concentramos en las más brillantes del la constelación de Centauro, observamos a la estrella más próxima a nuestro Sol que se halla a solo 4,3 años luz; cuando la ves y te deleitas observándola piensas en la posibilidad de que allí podría haber vida y, por otra parte, tan cerca de nosotros para comunicarnos, cosa que aún lamentablemente no se ha producido.
Pues pegado a Rigil Kent observamos un pequeño triángulo equilatero apuntando al sur cuya estrella principal es de la 2ª magnitud. Se distingue perfectamente la forma de la constelación; más débil que Rigil Kent ó α Centaurus. La constelación es el triángulo austral o (TrA) lo localicé a las 21:16 del, 17 de marzo desde Alice Springs; se trata de una constelación muy fácil de identificar sin ayuda de prismáticos al sur de Rigil Kent; su forma de triángulo equilatero le define perfectamente.
Triangulum Australe
Los curiosos de las constelaciones australes es que con la ayuda de los prismáticos puedes seguir identificando constelaciones complicadas para observar desde el hemisferio norte, es decir, entre el triángulo austral y Rigil Kent, observamos un pequeño triángulo isósceles débil y pequeño de 4ª magnitud sus estrellas; su forma es una característico compás de medición, se trata de la constelación de Circinus (Cir), lo localicé a las 21:17 del 17 de marzo de 2016 desde Alice Springs, Australia.
Constelación de Circinus (Cir)
Centrándome en Canopus, me dispuse con la ayuda de los prismáticos a localizar las constelaciones más australes y débiles que hay al sur, en un principio localicé Pictor (Pic) luego Doradus (Dor) y finalmente Reticulum (Ret).
Pictor
Son constelaciones muy débiles y con la ayuda de unos prismáticos se puede observar las formas.
Doradus
La constelación de Pictor ronda la 4° magnitud; la del Dorado más hacia el sur de la 3,5 y 4º magnitud. Y finalmente Reticulum un poco más al sur de magnitud media de también de la 4º; la Luna estaba en fase creciente y complicaba la observación. Las localicé a las tres a las 21:25 del 17 de Marzo de 2016 desde Alice Springs, (Australia).
Reticulum
Eran las 21:30 cuando localicé la constelación de Lupus; es una constelación muy fácil de localizar por encontrase después de la constelación de centauro y antes del escorpión; se halla en la misma vía láctea. Dese mallorca localicé su zona norte en mayo de 1986; pero, ha sido ahora, cuando la he observado en su máximo explendor. También localizada desde Alice Spring; resulta espectacular observarla con prismáticos ya que es una constelación rica en cúmulos estelares.
Lupus
Y finalmente sobre las 22:34 del mismo 17 de marzo localicé ya la última constelación denominada Apus o ave del paraíso que se halla en el en el sur del triángulo austral y en una zona muy pobre en estrellas; tuve que esperar una hora para que se alzara el triángulo para que pudiera localizar a Apus. Está formado pos estrellas de la 4º magnitud y por tanto, muy débiles.
Constelación de Apus
Y se hacía tarde ya que el día siguiente me tenía que levantar a las 5 de la mañana para ir a Uluru, el monolito más grande de la Tierra situado en medio de la nada (Australia) a tres horas por autobús de Alice Springs. En Australia las distancias son enormes, …
Uluru, Territorio del Norte, Australia
La primera conclusión que llego, es que el polo sur es muy pobre en estrellas y por tanto, resulta complicado encantar las constelaciones australes pero están rodeadas de espectaculares constelaciones del cielo austral muy brillantes; tales como Carina, Vela, Crux, Centaurus o Lupus.